Lina Maria Gomez

Amor, Amor

Pertenecíamos a otros cuerpos y nuestro corazón latía por otras almas; a nuestro parecer vivíamos el idilio que ofrece ese amor de vida. Pero quien iba a imaginarlo; un día sin pensarlo apareciste en mi vida, sin buscar algo más allá nos miramos y todo cambió. 

Que mezcla de sensaciones se revelaron en aquel instante; tu sonrisa iluminó mi día y me hizo sentir cosas que no esperaba. Estaba anonadada pues algo nuevo empezaba a suceder en mí.

Cuando tomaste mi mano, cuando rozaste mi piel, cuando tocaste mi cabello y cuando me entregaste tu corazón lo entendí... No había amado y todo empezó justo ahí, contigo. Ahí puede sentir lo que era el verdadero amor.