WalterFrancisco

Ceraunología

Prorumpen
Se dispersan.
Abaten vengativas albores a su paso.

Cuadrigas tormentosas.

Densas huestes de sombras
nos dejan devastados. Mancillan nuestros techos
Descubren nuestros rostros:
El amargo
El golpeado por el tiempo
El enjuto de penumbras.

Insertas
Las llevamos.
En frases desdichadas
En miedos repentinos
En gotas como abrojos que rasgan el cansancio.

Son contrareflejo en la ranura de una puerta
A punto de cerrarse.

Algo
Algo va a quebrarse
Algo va a caersenos del susto
La luna
Va a romperse en mil añicos
Y luego las ciudades
Los motores que las ungen de utópias
Las luces que nos atan la cordura.

Todo lo que nos salva reventara en la catedral lumínica. Sus caballos...
Sus almenas y cúpulas turgentes.

En las tinieblas de una cima contemplaremos sus escombros
Y esperaremos desarmados
La batalla de otro día.