Prefiero, a por ti seguir sufriendo,
Como los perros ser sacrificado,
O morder la manzana del pecado,
O cualquier castigo horrendo.
Prefiero antes la soledad
A esta absurda necesidad
De estar mal acompañado,
De cualquier amor necesitado.
¡Cuán fácil es la espina clavar!
¡Cuán difícil es la herida curar!
Harto de la espuma y de la luna,
Cualquier día cuando de la una,
Estar muerto prefiriera,
O solo. ¡De cualquier manera!
¡Cuán fácil es enamorarse!
¡Cuán difícil es olvidarse!
¿Que necesidad, Dios, tenías,
De robar una costilla mía,
Para crear a la mujer?
¡Su ausencia me hace padecer!
Prefiero, a por ti seguir sufriendo,
Como las víctimas ser torturado,
O ser asesinado, sabiendo
Que no podré estar enamorado.