yito

Yace un sueño.

 

 

Yace un sueño entre las calas
pues la espada de la envidia
con el filo de la insidia
le ha cercenado las alas.
Las espinas no son ralas
y se esparcen a su antojo.
Cuando hoy el bueno a su enojo
sin motivo lo siléncia
rueda el mismo sin conciencia
que pronto será despojos.