lorenzo salamanca garcia

Sayago, en la cuneta (lamento por una comarca zamorana)

Caminos para perderse,

entre curvas y encinas.

Vacas que pastan en libertad

y calles que son veredas

o grandes claustros monacales,

donde impera el silencio y las ruinas.

Fiesta en torno a la Virgen:

los hombres hacen la subasta

y las mujeres las empanadas.

Internet no llega

y un tractor viejo ha sustituido a la mula:

¿dónde está el progreso?.

Muros de piedras que separan fincas.

A la solana, vecinos comparten la vida.

Ríos que recuerdan la guerra del oro.

Puentes que despiertan el vértigo.

Pueblos que viven de recuerdos,

donde la juventud tiene canas.

Apenas quedan raíces:

generaciones han emigrado 

al País vasco, Cataluña o América.

Mientras hay territorios que quieren ser nación, 

aquí ya no quedan fronteras:

Portugal es el pueblo de al lado.

El reloj del tiempo parece estropeado,

sino fuera porque el sol se esconde.