alejandro fozar

VI. Orgasmo

La dilación de tu acorde se oyó 

en las escamas más profundas,

en las salinas y en las cunetas,

en la salvia lenta, en los óleos

y la flor seca

se oyó en la arena apretada, 

en las pupilas y en los humedales.

La dilación de tu acorde 

se estiró como un espigon,

como el filo del horizonte,

atravesó la roca, el olvido

y el corazón.