Elías Leiva

Oración de un desdichado

Mis manos húmedas de refregar

Refregar y refregar

Mi mente en casa

Con mi familia

10 horas atrapado en una fabrica

Recibiendo lo que un jefe

Deja de su banquete

Humano me siento,

Con el dolor de mi corazón

Pero aun animal

Por el mal trato sin razón

No puedo comprar el pan si no estoy aquí

¿Quien trabaja por mi?

¿Quien suda por el que suda?

¿Acaso regalariais tu tiempo a un dictador?

A un infame que en tu desgracia

Encuentra sazón.

Dios si existes te pido tiempo

Que es lo único

Que dura para siempre.