Francisco 1987

El Rìo de la Plata

caminando por el Rìo de la Plata
me encontrè una mina
y de anteojos negros me pareciò
Claudia
a lo sumo tendrìa la sensaciòn
de estupor por andar descalzo
a tempranas horas del dìa
sin condicionar los juegos de los niños
y buscando un abogado
para defender a los estilistas
del Rìo de la Plata
necesitamos medicinas
se les escucho decir
prepàrense para lo bueno
que las olas del mar
rompen en tus narices
desde luego el silencio cuenta su verdad
y nos identificamos con los santos
que pasaron tribulaciones
y jamàs se quejaron de su suerte
los guerreros no temen
escuche decir a mi hermano
y le hice caso
y tuve una visiòn de viejos amigos
de ordas de hormigas tatuadas de
adentro para afuera
en el Rìo de la Plata
no se cuecen habas