Existen mil tipos de atardecer,
Los hay en el mar, en bosque
En la ciudad o en el campo
Existen grises o de colores
Con lluvia o sol radiante
Solo o en compañía
Yo lo prefiero en la montaña
Lo prefiero sentado mirando hacia el horizonte
Lo prefiero sintiendo como los últimos rayos de luz Se escapan entre mis dedos
Lo prefiero sintiendo el calor de esa tácita última caricia solar
Lo prefiero al ver como se refleja en el mismísimo hielo eterno de la nieve
Creando un abanico de tonalidades que hace que se le erice a uno la piel
Desde el último naranja del día, hasta el primer azul nocturno
Ese azul que se acompaña de un frío que nos eriza la piel,
Y comienza a dar paso a la luna y las estrellas
Como explicar que toda esa magia,
Toda esa mezcla de sensaciones
Que tensan la piel y el alma
Al límite del quiebre del sentir
Y de poner el corazón en manifiesto
Es exactamente lo que veo y siento
cuando ELLA me mira y me sonríe.