Luis Pizarro M.

DEJA QUE YO TE LO CUENTE LIMEÑO

Déjame que yo te lo cuente Limeño,

de ese ensueño que engalana tu mirada

de estar en ésta la lucha, tú cual plebeyo.

A ver si así tienes un mejor mañana.

 

Déjame que yo te lo cuente Limeño,

ahora que se ha puesto en pie el pueblo,

porque el recodo y el futuro prometen.

Ya que saben que tu lucha al fin procede.

 

Claro que yo te lo contaré Limeño,

de esos días tan crueles y olvidados,

en que el país herido estuvo tiempo.

Aquel siglo en que azotaron a mis hermanos.

 

Claro que yo te lo contaré Limeño,

ya que todavía los compatriotas resisten,

sin dar brazo a torcer siguen sus sueños.

Y dan a conocer que los peruanos si existen.

 

Así que deja que yo te lo diga Limeño,

a ver si así retumban el Palacio y el Congreso,

de saber que defendemos la libertad y derecho.

Con sed, con hambre, con alma y con recelo.

 

Deja que sea yo quien te diga Limeño,

para que no te anden más con rodeos,

todo son puras falsedades y misterios.

Pues hambruna por doquier vemos.

 

Ay permíteme que yo te lo diga Limeño,

ahora que en una soga de oro y plata,

los rinocerontes se mesen con esmero,

ahora que la ignorancia se desenmascara,

ahora que la utopía renace de nuevo.

En ese ensueño, Limeño,

que engalana tu mirada.