Eduardo Antonio Taborda

RUBIOS SON TUS CABELLOS

 

Como el rubio de tus cabellos
se reflejan tus ojos en su alma
no es amor por no tenerte
es amor por guardarte
eternamente en su corazón.

¿Si las oportunidades pudiesen
jugar a ganador tan sólo una vez
y sólo con un beso eterno tuyo?

su alma no te deja de ansiar
en luz de atardeceres contentos,
y la boca ...
la boca espera el sello
de lo que trasciende a lo imposible
marioneta del destino
efímera alegoría de colores
en el cielo conocido;

son habitaciones inhabitables
de decencia e inocencia pura,
son sollozos de impetuoso varón
ante lo prohibido de tocar su piel
en el clamor de los deseos;

y las sabanas con las arrugas
de los cuerpos fantasmagóricos
de nunca estar ...
y entre la sangre
nunca derramada por la pureza
de la especie,
el cielo y la cima
el sol y las estrellas
la mesa y dos vasos de agua
servidos para la vida limpia;

amor que el latir de su corazón
haga suspirar al tuyo de deseos
y que la vida que multiplicaste
en ecuaciones perfectas
te brinden la sonrisa
del candor de niños
rubios como tu sombra
eterna en sus recuerdos.

Eduardo Antonio Taborda
09/09/2017