Esteban Mario Couceyro

Amor en cuatro estaciones

Mi pequeño amor

tantas veces mis manos

los besos

todo yo

he cubierto esta piel deseada.

 

Te he amado

con el orden de un calendario

cuidando en un principio

que nazcas en primavera

en delicados brazos

que me aferraron

en la flor de esa boca

nacida en besos.

 

En el estío

pródiga tu cintura

creó la vida

y el universo todo

fue nuestro.

 

Tus cántaros alimentaron

los amaneceres

con gorjeos de crianza

y manos muy pequeñas

te enmarcaban el rostro.

 

El tiempo fue pasando

como un péndulo

exacto del destino

día a día tus besos

y los míos

hicieron el cielo

y los pájaros otoñales

que aparecían

después de cada lluvia.

 

Paso tanto tiempo ya

la vida fluye como un río

a nuestro lado

el invierno va despojando

el paisaje de nuestras vidas

y nos inunda lentamente

el atardecer en la mirada.

 

Nos hemos amado

con el misterio de la naturaleza

a veces me pregunto

por qué

y cuando miro tus ojos

en el reflejo de la ventana

comprendo por qué te amo tanto.