Martina!

Heroína

Tantos años han pasado

y aun recuerdo tu sabor.

Heroína, así te llamo,

y alguna vez lo llamé amor.


Amor desenfrenado, adictivo y posesivo.
Después de tanto tiempo, ahora entiendo lo enfermizo

De vez en cuando apareces,

en recuerdos y en mis sueños.

La soledad lo calma todo,

y la madurez logra al fin su efecto

Teníamos tantos sueños,

y uno a uno lo rompimos.

Hoy ya casi no hay recuerdos,

ya no hay nada, ni un suspiro.

Mi vida sería tan distinta sí siguiera la adicción.

Suave, dulce y doloroza,

¡que recuerdos!

¡que sabor!