pani

ÁNGELES SIN NOMBRE...

LLegué zaherido

e incólume...

a la patria de los besos,

 

en la tarde

manifiesta...

de su herida derramada,

 

allá donde

los impávidos

claveles...

 

entre sedas deslazadas

se deshacen...

apenas tenues,

 

entre arcángeles

custodios...

 

de tibieza desnudada.