HectorFlores

El ser romántico.

Sentir el molde de ella, 
esa figura de la nada, 
tejida con un leve deseo, 
sentada a mi lado, 
acostada en mi cama.

Cubierta por amor hacia el espejo 
deseante, esperándote a ti: 
a aquel “yo” que la posee cuando quiere. 
Ese “yo” que no existe más que una ella, 
a mi lado, acostada a mi lado; inexistente.

Sólo soy un latido, 
un corazón redondo que 
no sabe estar quieto, un corazón 
que lleva a cuestas un alma y un cerebro.

Soy un espíritu apasionado que deseó 
ser cuerpo, junto a su cuerpo.