Esteban Mario Couceyro

Amor confuso

Eva y Anna

fueron a mi encuentro

esa tibia tarde

de otoño.

 

Eva

solo miraba

sin pronunciar palabra.

 

Inquieta Anna

desde atrás

como si fuese Eva

me dijo

cómo estás.

 

Bien, les dije

mirando a Eva

mientras Anna

nerviosa

tapó su cara

con ambas manos

escondiéndose, tras Eva.

 

Dime Eva

que sientes por mi

le pregunté.

 

Anna empuja

a Eva

y exclama.

 

Yo solo siento

amor

y Eva

no lo dirá

aunque sabe

que somos una

y tu eres

dos

que no podrán

saber

quién ama

a quién.