Patricia Aguilar

Amor mío

Cómo el viento al rozar mi cabello

llegaste y te esfumaste sin darme cuenta,

me acariciaste el corazón tan suavemente,

¡Tan sutil fuiste amor mío!

que perdí la noción del tiempo.

 

Esos dos segundos los quise eternos, 

y si solo Dios sabe de eternidad

me jugaría la vida por preguntarle 

dónde es que ahora estás.

 

Mi lamento es el tormento 

de los fantasmas por las noches

¿ Y quién se lamenta más que ellos? 

Este ser de carne y hueso 

que por extrañar tus dulces besos 

te busca en la mícera oscuridad

privado de su propia libertad. 

 

Mi corazón me dice que no abandone

que te volveré a ver, que te volveré a  tocar

y aunque hasta ahora no me perdone 

te prometo amor mío que el día en que te encuentre

no te volveré a soltar.