Pensamiento.

EN NUEVA YORK Cont. al tema de F. G. Lorca

Continuación al tema de ayer

 

He creído que es mejor que figure el poema completo.

Aquí está el resto al trozo de ayer:

 

NOCTURNO DEL HUECO

Terminó así:

¡qué cielo sin salida!, ¡amor!, ¡qué cielo!)

 

Y continúa:

 

Para ver que todo se ha ido.

Para ver los huecos de nubes y ríos.

Dame tus ramos de laurel, amor.

¡Para ver que todo se ha ido!

 

Es la piedra es el agua y es la voz en la brisa

bordes de amor que escapan de su tronco sangrante.

Basta tocar el pulso de nuestro amor presente

para que broten flores sobre los otros niños.

 

Ruedan los huecos puros, por mí, por ti, en el alba

conservando las huellas de las ramas de sangre

y algún perfil de yeso, que tranquilo dibuja

instantánea sorpresa a luna apuntillada.

 

Mira formas concretas que buscan su vacío

perros equivocados y manzanas mordidas.

 

Cuando cuento en la cama los rumores del hilo

has venido, amor mío, a cubrir mi tejado.

El hueco de una hormiga puede llenar el aire,

pero tú vas gimiendo sin norte por mis ojos.

 

No, por mis ojos no, que ahora me enseñas

cuatro ríos ceñidos en tu brazo

en la dura barraca donde la luna prisionera

devora a un marinero delante de los niños.

 

Para ver que todo se ha ido

¡Amor inexpugnable, amor huido!

No, no me des tu hueco,

¡que ya va por el aire mío!

Para ver que todo se ha ido.

 

LA LLEGADA A NUEVA YORK: WHITMAN Y PESSOA

 

Sin embargo, el viaje no acaba de curar sus tristezas,

más bien indica a sus amigos que no sabe bien por

qué ha partido: \"Me lo pregunto cien veces al día -dice-

me miro en el espejo del estrecho camarote y no me

me reconozco. Parezco otro Federico\". Pero lo que ve

cuando llega a la ciudad de los rascacielos le devuelve

el ánimo y...

 

.

Continuará