Jess Delargge

POCO A POCO (Parte 2)

Y sentía cada vez más mariposas en mi interior

Revoloteando, revoloteando, revoloteando.

Sí, no pararon, y me hicieron saber sus ganas de volar contigo

Pude sentir un torbellino acercándose

y vernos juntos caminando hacia él.

 

Y así llegamos,

Un día que parecía tan igual a los demás

Con la misma ansiedad y locura de solo mirarte,

Pero esta vez tenía tu mano, y cerré mis ojos,

Deje de mirarte para solo sentirte.

 

Y entonces descubrí

Una mariposa desconocida rozando mi piel

Y sin abrir mis ojos la vi escapando de tu pecho

Y era tan dulce como videarla danzando

En la suavidad de un jardín a pleno sol.

 

Sus delicadas alas moviéndose lentamente

Sin importar cuanto jardín falte por recorrer,

Abriéndose paso poco a poco, sin prisa,

Y así pude mirarte y tener la más esperada conversación

Con los ojos cerrados y sin articular una sola palabra.

 

Era posible, y su aleteo era cada vez más imponente

Ansiosa de conocer nuevos jardines,

Ambos dejamos volar nuestras alas

Con el viento a favor y horizonte sin final

Te conocí y me conociste como siempre quisimos conocernos.

 

Encontraste mis puertas y de mi salieron a encontrarte

Estas amigas revoloteando dentro de mí,

Se adueñaron de ti por fin, te adueñaste de mí por fin,

Nuestros deseos se quedaron muy pequeños

Al compararlos con nuestra realidad.

 

Y ahora es imposible solo mirarte

Y ahora es imposible solo abrazarte,

Se han quedado abiertas las puertas

Y el viento fuerte me invita a emprender el vuelo

volar en tu piel y en tus labios con los ojos cerrados.