salgomanzano

Amor inmenso

Palabras cálidas de labio ardiente

suben en ratos de ardor quejumbroso.

Llamaradas vienen ardientemente,

calentando el adentro silencioso.

 

Del pecho se derrama, qué caliente,

el decir -aire atardecino, undoso-,

cuando el sol se cae por occidente,

cruzando el azul de un mar proceloso.

 

Cual águila quiero irme a las alturas,

no regresando más a las bajuras

de donde salí, que mi  solo estar

 

-sufriendo tiene el continu pesar-

desearía enlazarse gozada-

mente a ti, de mí tanto deseada..

         (Salvador)