abraxas

Siempre triste desierto

Gira mi cuello como molino y tormenta
en noche de tiempo detenido, profanado de caja oculta
hundido en lo que no existe, me pierdo
de modo que me dejo caer hacia subsuelos sin luz
y de modo tal que no hay un solo aire que pese mas que lo callado
cuando la presíon de los dias corta los vidrios
y la iglesia negra de enfrente se llena de serpientes
me recuerda que el olor de la mentira dicta el primer latido de la noche.

Entonces los hilos que me atormentan se vuelven como piano
y la máquina desangra aceite en forma de queja
de insulto, por que siente el insulto de mis dias
aborrecida de que mis versos sean siempre triste desierto
entonces de nuevo le explico que no soy yo quien enrieda las cuerdas
que no soy yo quien estalla las campanas
y que no es por mi que yo he nacido.

Para la noche mas pura ya estoy reviviendo mares
dejando caer anclas atadas en pleno centro
por que cuando la luna brilla liquida y ciega
mi voz se hace canto y mi alma respira