Alexandra L

Jesús

El dolor se hace presente
la burla, la humillación
va sangrando el corazón
con su corona de espinas.


Es la agonía extendida

la crueldad hecha emoción
es brutalidad pasión
sin compasión;  desmedida.


Cada una de sus heridas

cada insulto, la vergüenza
las caídas, la indolencia
los azotes, la malicia.


De antemano ya sabias

lo que sería tu viacrucis
sentiste miedo señor
como humano lo sentiste.


Viviste en carne propia el dolor,

tu boca bebió amargura
apreciaste la estatura del hombre
en su terrible maldad, para poder perdonar.


Señor nos dejas andar en este libre albedrío

recorriendo los caminos de esta efímera existencia
desterrados, sin conciencia, camino a la destrucción,
tu creación, casi perfecta, hoy va por  pasos perdidos.


La mano en el corazón ante tu imagen dolida, torturada

que nos mira, con dulzura, con amor, a tus pies pido señor
ilumines esas mentes, las soberbias, prepotentes, de tendencia irracional
líbranos de todo mal, ser lo que somos, hermanos, no nos dejes de tu mano
ahora y para siempre, amen.