Catelgood

Alguna vez la vi desnuda...

Alguna vez, la vi desnuda…

alguna vez la vi desnuda…
sin tapujos, me mostró el más puro de sus sueños
había, escondida entre alguna sonrisa amarga,
una lágrima por dos o tres deseos sin dueño
y algunas vigilias de horas perdidas y largas

Muy cerca de su angustia derecha, tenía eso sí…
un hermoso lunar que lucía con secreto orgullo
en donde se habían amontonado mil sonrisas
y que ella tragaba bien, con ese donaire suyo

Alguna vez la vi desnuda…
Tenía una aureola de perversiones guardadas
ahí en donde se escondían mis pobres versos
y las regalaba sin disimulo en caricias aladas
y las rehacía al instante en el vuelo de sus besos

Si miraba bien, con los ojos del corazón
podía ver también una o dos calamidades
que te otorgaba con la más mínima razón
como si le divirtiera darme sus tempestades

Alguna vez la vi desnuda…
En el secreto triángulo y muy cerca de su abrigo
tenía mil hijos, dolorosos y pegados al ombligo
que sólo la hacían serena en su materno dejo
como un espejo de dolor alegre y silente olvido

Alguna vez la vi desnuda…
Encontré su más intima pena y desbordada alegría
besé sus llagas y puse consuelo bebiendo de su copa
y porque la vida es así, y porque además es mía
muchas otras veces, (las más), la he visto sin ropa.