ELF

DE RODILLAS

Podrá el cuerpo constreñido de rodillas caer y aún así, mi espíritu seguirá de pie, erguido soñándote...

 

y cuando el tiempo me atrapé en su indeclinable afán, y se cieguen los ojos de mi entendimiento, seguiré inventando fantasías para que en cada alborada  descanse mi locura en tu sonrisa.

 

Sé que en mi mundo nunca me rechazaras; jamás sucumbiré a quien me prohíba conocerte; que la realidad mate sueños de otros, pero no los míos.