Wellington Rigortmortiz

* Eutanasia (La historia acerca de Ella)

Tratando de vaciar

mi mente de recuerdos magros,

roídos por la conciencia

y podridos por la estupidez (fantasía ridícula

que la desesperación evoca),

escribí la historia,

aquella que mi alma

decidió encarcelar con el tiempo

en lo más profundo de mi ser,

intentando así,

hacerles cumplir su condena,

pero dentro de mi

ya que la justicia que tanto deseaba,

jamás llego, ni llegara quizás;

…se trata de aquella historia

de magnifico comienzo,

con un intermedio

ingenuamente esperanzador,

y un final, desastrosamente inesperado,

parodia cursi aparenta ser la historia,

más después de terminarla

y releerla no sé por cantas veces,

dejo de ser novela burda y predecible­;

…en una semana

de dolorosa escritura, resumí

cinco años, más algunos meses

de crueldades, ofensas, humillaciones,

orgullo, ira, rencores, decepciones,

traiciones, desconfianza, dolores,

mentiras, infidelidades,

decidí sacar de lo más profundo

de las mazmorras de mi subconsciente,

a todos esos asesinos silenciosos, para,

que, en cada momento por mi requerido,

en los recuerdos lentamente meditados,

rindan sus confesiones

para poder ser liberados,

de cada detalle tome nota,

cada uno tenían su rostro, el de Ella,

pero con distinta voz, al escribir

todo cuanto volvía a revivir, imagine

como me observaría Ella,

en esos instantes,

llena de burla, con algo de temor

y una pisca de remordimiento,

…con vergüenza, imbécil me sentí,

pero, seguía escribiendo

todo cuanto el mal

en sus distintas facetas

me confesaban,

todos, vestidos con el cuerpo de Ella;

volví a vivir algo que creí jamás

se confrontaría de nuevo ante mí,

el descaro, la indiferencia,

la falta de vergüenza,

la mentira, y verdades a medias,

…pocas fueron

mis dudas despejadas,

las más importantes

me interesaron conocer,

las demás, solo dentro de Ella

permanecerán

eternamente condenándola

o quizás,

solo siendo compañeras fieles

dentro de su infidelidad

sin alma, ni conciencia.

 

Una por una,

las partes del total del mal,

fueron liberadas, y salieron de mi

sin regresar a mirar,

en silencio de burla, mas, no me importo

que así sea su reacción, pues,

mi interés se centró

en escribir la historia,

despejando mis dudas para así,

contar la verdad,

la que va más allá de si misma, pero,

que lamentablemente no es absoluta,

aunque me consuela pensar en que Dios,

la escucho, observó y que después

que se la ofrezca por medio del mar,

la medite, la desaparezca por completo,

de mí y de Ella,

…la historia caerá

en otras manos con el tiempo,

esa es mi idea,

para que no pierda el destino

y la vida, la memoria.

 

 

* Anexo

 

…está completa,

más de cincuenta hojas escritas,

sin perfume, ni adornos esta vez,

enrolladas, son depositadas en el interior

de un ataúd cilíndrico de cristal,

con una fotografía, una corta poesía

y arena de las faldas grises del mar

que simulan a la de un reloj de arena roto;

…el agua y el fuego purifican, restauran,

elegí el agua, complemento del mar,

porque este, jamás devuelve

lo que se engulle, lo purifica

y se lo guarda, restaura,

el fuego purifica.

 

…Ella,

así bauticé a la historia que di vida

y a la que hoy,

bajo el poder inmortal del mar,

se la quite con mucha ternura,

imaginando nuestro comienzo

con un toque leve de mis labios

en los suyos, de igual manera,

es en esta despedida

mientras el mar

aleja lentamente de mí,

su inerte esencia

que descansa eternamente,

en un ataúd cilíndrico de cristal.