luna ponce

Desasosiego

Llevo tu nombre como un rito del corazón.

Me espanto al pensar que en un descuido lo pudiera gritar.

 

¿Qué pasaría si en ves de repetir tu nombre como oración, solo lo grito una vez con gran devoción?

 

Chingada sociedad, me señalaria de por vida,

pues tu eres eso que dicen como cosa perdida.

 

Y mientras que hago yo, dibujar tu silueta en el aire,

tocarla suavemente, con ritmo  y pasión.

 

Enredarme entre tus brazos y acariciar suavemente tus cabellos,

beber gota a gota tus besos en luna llena.

 

Mira como me tienes, haciendo porquería y media,

y todo para que me mires y te des la media vuelta.

 

Y al susurrar tu nombre en la tierra, siento que mi alma se libera,

no sera mas prisionera, ni yo su carcelera.

 

Que se valla a la mierda lo que yo siento por ti,

si tu mandaste al diablo los besos que te di.

 

Y aun así te pienso, porque no es una simple gripe,

mas bien lo que yo siento es como estar desnuda en invierno.

 

Me condenará cupido, si en estos últimos versos,

yo te mando a ti a una cuadra mas allá de la chingada.

 

Y no vuelvas tus pasos atrás, ni me claves tu mirada,

mira que he decidido ser libre, y tu entorpeces mis agallas.