Pedro Ruiz Lopez

LA JOYA MÁS VALIOSA

Balcones con siluetas de mujer,

Agigantan mi olfato de pasión,

Las Taquicardias, en mi corazón,

Efecto que provoca, un bello ser.

 

Alegran esta, vida terrenal.

A una mujer, le debo yo la vida,

Tan claro que ella es, mi madre querida,

Son tan divinas, algo sin igual,

 

Grande tesoro, de la vida esencia,

De un jardín tan hermoso, bellas flores,

Apoyo de los mas grandes señores,

La vida es bella, ya por su existencia.

 

Sin ellas ya, moriría la vida,

Ya la humanidad, se daría por muerta,

La tierra quedaría, tan desierta,

Son la gran flama, total encendida

 

Mujeres tan divinas lo serán,

Son invencibles, en todo momento,

Del alma de los hombres, el sustento,

de ellas todos, siempre dependerán.

 

Ya mucho antes que yo, ellas son primero,

Por defenderlas, daría mi vida,

Para que flote, su llama encendida,

Solo es la mujer, lo que más prefiero.

 

Más que diamante, son algo mas que oro,

Del universo, las grandes estrellas,

En este mismo mundo, las doncellas,

También del mismo, el más grande tesoro.