Carlos Cianciaruso

Un Dia Especial de Julio

 

UN DIA ESPECIAL DE JULIO

 

Un día especial caminando recuerdos

desde tu última morada te hablé al cielo

caminé hasta nuestra casa

pasé sobre los pasos que recuerdo

profané los tiempos y reflexioné sin estar de acuerdo.

 

Al otro día una llamada propuso un nuevo encuentro

y sin pensarlo recibí el mensaje y reí en silencio

¡ volvería a recorrerte ¡ el mismo camino

de alegrías y tristezas y aquél escenario

¡ Que lindo volver a verte ¡

 

Y volví a mi barrio por la plaza de Juan B Justo

allí estaba la fuente, el ombú y el bebedero

lo conocía todo ¡ cada árbol un recuerdo ¡

la calesita volvió a girar, los niños en bicicleta

yo sentado y escribiendo en una mesa que antes no estaba.

 

Las veredas rojas hasta Boyacá y comenzó el asombro

grandes y lujosos edificios adornaban lo que llamáramos El convento

otros tiempos, fútbol y esparcimiento

entre cascotes, arbustos y trepadas entradas clausuradas.

 

Seguí mi camino pocas cuadras y allí estaba

imponente solitario y silencioso estadio

lo saludé con el corazón le regalé una sentida mirada

al que fuera y es partícipe renovado de una gran pasión.

 

Obscurecía. Debía volver a casa con un volver que no era tal

Estaba yendo, nos encontraríamos pronto

Al llegar a Andrés Lamas, el Quiosquito que murió y le cerraron los ojos

al cruzar ya fui dueño del tiempo y mi corazón ya no fue silencio.

 

Y nos encontramos en aquel pasillo, con aquella puerta,

con los tres buzones y viejas paredes que siguen y seguirán siendo

por todos los tiempos la canción de cuna que se irá conmigo

dejando tan solo un largo silencio.

 

                                                     Carlos Cianciaruso