Carlos Roman Ramirez

CaminerĂ­a.....

de mil caminos ciegos

y la humanidad transeunte,

cada quien para cada cual,

no faltan ni sobran,

esotéricos, inefables, inexorables.

El caminante se posa

a la vera del cansancio

a rememorar sus pasos,

los que dió sin poder evitar,

los que evitó pudiendo dar,

los anhelados inalcanzables......

pensó que era autónomo,

hacedor de parajes y trinos,

creador del pan, del vino y del deseo,

mas todo estaba escrito.

Nacimiento es la desembocadura

de un misterio que descubre

la existencia de luces, sombras,

rosicleres, frondas, pedregales, lavajos,

senderos bifurcados.....caminería

a la manera de Aquel, a su modo.

Indefectiblemente la niebla ciega,

la piedra es dura, la lluvia moja,

la noche oscura, la parca aguarda,

todo estaba escrito,

marionetas somos de un Dios

empecinado en disponerlo todo.