FLORENTINO II.-

PARA TI, POR ENTREGARME AMOR Y PACIENCIA

Y te recordamos Señor
Pen este día especial en que volviste
después de haber sido muerto,
por la traición de una fracción de tu pueblo.
Te alabamos.., te glorificamos
y cada domingo recordamos esos momentos
en que fuiste quebrantado.
Partiste el pan para que los apóstoles lo comieran
junto a un sorbo de vino, para recordarte,
cada vez que nos reuniéramos como Iglesia.
\"Hago esto para que recuerden mi cuerpo quebrantado por los dolores.
dejo mi copa para simbolizar mi sangre
que derramé, en beneficio de los que
 se arrepienten de sus pecados.

y vienen a Mí, con corazón quebrantado

y espíritu contrito ”

 

Señor, te damos gracias por tu infinita misericordia,
derramaste tu Sangre preciosa
y cargaste con nuestros pecados.
Eres el árbol de la vida,

fortaleza de nuestras almas,
renuevas nuestros espíritus

 al instante del bautismo,

que Tu ENSEÑASTE!!
Eres puerta de salvación eterna,
por Ti, llegaremos al Padre,
eres el Camino, la Verdad y la Vida.
Nos consagramos a ti…,  Padre Omnipotente,
quebranta nuestra alma pecadora,
danos la fortaleza plena para resistir al ser carnal

 que corroe el alma.

Transfórmanos en seres espirituales.
Haz Tu voluntad en nuestras vidas,
guíanos por las sendas de tus palabras,
al reunirnos, en tu Casa de oración, 
y escuchar tus enseñanzas;

Evangelio de Salvación,
 dadnos sabiduría para entender tus señales
y permanecer por siempre en tu

 Santa Gloria.

Dadnos de esa Gracia que Tu concedes;

Armonía, amor y esperanza.
a través del Hijo Bien Amado.
Él es nuestro único intercesor ante Ti.
Él es el Camino, la Verdad y la Vida;
El Camino,

estrecho sendero de consagración iniciado

al instante del Bautismo por inmersión,

ejemplo que dejaste y, se haga toda Justicia.

La VERDAD...,

TU Señor ¡!.  la entregas, eres Luz

 del conocimiento en nuestras vidas.
La VIDA ...,

             Sólo Tu Señor por Sacrificio de Expiación

 Ofreces la Vida Eterna,

si en obediencia te consagraste.

Abriste Señor nuestro corazón y nuestra mente.
Abriste nuestros ojos espirituales,

 limpiaste nuestros oídos, para escuchar la palabra.
La palabra de Sabiduría para entender…,

 los Misterios del Santo Evangelio, que degaste.
Eres Señor!!.,  maná caído del cielo

para alimentar nuestro espíritu,.
Señor..., te Amamos,

 te Glorificamos, elevamos nuestras Alabanzas

 invocando tu Sagrado Nombre.
Paz en la Tierra al hombre…, aquel de buena voluntad, 
al que con verdadero amor te Reverencia

al que siente temor por sus transgresiones.
Eres luz de nuestra Vida.
Tu Amor entregas a quien ante tí.., se humilla.

Reconocemos tu gran sabiduría y Poder.

que emana de tu presencia.

Eres vida constante,
motivación de nuestra fe inquebrantable,
fuiste Palabra Viva del Perdón
te sacrificaste por la humanidad toda,

serás nuestro abogado ante el Padre.
 te ofreciste como el Cordero Expiatorio,
 derramando tu Gloriosa Sangre 
para lavar todas las transgresiones.
Fuiste humillado, el látigo desgarro tu Carne…,

Tus vestiduras se repartieron, jugándola a los dados.

Ultrajaron tus sentimientos al izarte

desnudo ante tu pueblo.

Como símbolo de mofa un letrero,

 “Rey de los Judíos”
mientras te humillaban y laceraban tu cuerpo,

una oración elevaste al Padre.

 “Perdónalos.., porque no saben lo que hacen “
 después del sufrimiento…, tu parte mortal

Se ofrendó a la tierra.

Eterno Padre
En el Gran Concilio de los Cielos
Pusiste el Plan de Felicidad y el de Salvación

 a nuestro alcance.
Deberíamos venir a morar un tiempo a esta esfera
que llamamos Tierra, una de sus creaciones

 para nuestra prueba.

la dotaste con todo lo que el hombre necesitase
para el sustento y desarrollo necesario

de su existencia.

 Nos entregaste un don divino que nos guiase
el Albedrío PADRE y por él sembramos nuestro destino
que al término de los tiempos cosecharemos.
Si has sembrado buenas acciones

 la cosecha será abundante.

 Si has sembrado iniquidad, transgresiones

 y pecados no esperes el perdón del Padre.

Estamos cumpliendo nuestro periodo de prueba
y saber si somos capaces de ejercer

nuestra obediencia
en mandamientos que dejó el Padre.
Nuestro destino es volver a su presencia,

 lograr la Vida Eterna que anhelamos.

En la vida, muchos desechan la oportunidad,

gozándose en vanidades mundanas,

 haciendo suyo el orgullo, las disensiones, rencor, despreciando la humildad y la mansedumbre.

Recibe ! Oh,  Padre ¡ nuestras Alabanzas

Al Glorificar tu Santo Nombre.

 

 

 

A m é n

 

 

Es colaboración en Alabanzas al Señor de nuestras vidas..,

 

Florentino Novoa Saavedra.