solitario del silencio

La noctámbula.

Lejos del mañana. En la noche recóndita del universo. Los ojos negros de la noctámbula parpadean mientras medita en silencio. En su mutismo cósmico lleno de misterio. La noctámbula anhela el sueño mientras observa su propia sombra. Asombrada. Y también danza junto a su sombra sagrada. Mientras acaricia su blanca espalda. La noctámbula juega a que recupera su infancia olvidada. La noctámbula mueve sus piernas luminosas. Impaciente. Nerviosa. Tiene necesidad de lazos y de abrazos . Tiene necesidad de risas. Tiene sed de alegría en su interior. Sabe que ya no cabe en ninguna patria su redención. Observa las paredes de su habitación. Y ve la ventana. Mira la puerta que la encierra con mucha atención
Tiene ganas de romper la jaula. De despojarse y echarse a volar..
La noctámbula observa las horas. Se despide de todo. Y luego se marcha. Cual Viajera alucinada y enamorada. Aleteando, dejará atrás toda tragedia y se irá por esa noche fría, que apacigua sus heridas.