Faeton

La letra escarlata

"¿Quería éste persuadir a la pobre mujer –que se resistía y aún era sólo a medias su víctima– de que la apariencia exterior de la pureza no era más que una mentira, de que, si la verdad se revelara por doquier, una letra escarlata flamearía en muchos pechos además del de Hester Prynne?"
‘La letra escarlata’, Nathaniel Hawthorne

 

La más cara no oculta la vergüenza
cuando la felonía perpetrada
es tamaña, y no existirá soldada
que compre al espíritu y lo convenza

 

de que la iniquidad es la que trenza
los actos de una mente enajenada
cuando pierde la razón azorada
por un impulso ruin y sinvergüenza.

 

El pecado es una letra escarlata
que, coruscando en su pecho ominoso,
le recuerda la ignominia que le ata

 

a su pasado, marfuz y oprobioso,
con un dolor tan agudo que mata
el alma con un tormento espantoso.

 

© Óscar Bartolomé Poy. Todos los derechos reservados.