Eddy Gtz

MI CONDENA

¡Hoy! me llevan a cumplir mi condena,

más no imaginas cuanto quiero verte,

y ahogarme en los deseos de mirarte,

para redimir esta honda pena.

 

Si bien sabes que mi culpa es ajena,

es culpa del labio que robo tu beso,

si por ello hoy a la cárcel voy preso,

acepto; yo, la perpetua cadena.

 

Y si culpable soy, es por amar tanto

a una mujer, que no me pertenecía,

que tenía dueño, que no era mía,

que dio de sí solo su cuerpo santo.

 

En donde se albergo la piel y el llanto,

si por eso soy culpable no hay duda,

de morir sea la sentencia dictada,

y a mi rostro cubra su piel… su manto.

 

Si después de besar sus labios digo,

no poder ocultar este pecado,

y por amarla estaré condenado,

he de aceptar feliz este castigo.

 

De morir al beber el trago amargo,

de su boca, su piel y sin embargo.

He de ser el culpable del destino,

que me espera al terminar el camino.