FELINA

¡CAMINANDO BAJO EL SOL!

Deja que yo te busque

rompiendo los caminos polvorientos,

esos que me resecan el alma

y en los que no encuentro un oasis

para calmar esta sed que me devora.

No importa que sean caminos

de herradura por donde sólo

galopan desnudas las melancolías.

Deja que el sol dore mi cuerpo

hasta verter sangre de agonía.

¡Yo por tí mi vida daría!

así me toque batallar contra

las inclemencias , que zozobran

a cada paso el camino,

en busca de una nueva víctima

para ensañarse con ella

y extraerle de las entrañas la calma.

Deja que yo cuelgue en la luna

los faroles que me alumbrarán

Los pasos sigilosos, pasos temerosos,

Pasos vagos , con huellas de cansancio.

Yo venceré el cansancio y la fatiga,

llegaré hasta donde está la noche

que te cubre con un cielo encantado;

A donde las estrellas danzarán contentas

con sus mejillas nacaradas, sus labios pintados

Y sus cabelleras con ramos de azaleias.

Allí he de encontrarte y ya no tendré:

Soles incandescentes quemándome la espalda,

fatigas en mi frente

y un carazón  atormentado

buscándote siempre.

Felina