Le dije Si a tu amor hace muchas primaveras,
sobreviviendo veranos que con fuego abrasador,
combatieron con sus dardos nuestra naciente ilusión.
Sus llamas hemos burlado y seguimos al invierno
tan helado con su frió nuestro refugio atacó
tratando con su fiereza congelar nuestra pasión.
mas una manta muy tibia se extendió sobre nosotros,
el calor de Jesucristo no nos dejo sucumbir.
Luego vimos venir primaveras y otoños,
aunque nos dieron retoños o nos arrancaron las hojas,
nuestras raíces crecieron arraigando nuestro amor.
Hoy con fuerza y ya maduros, retenemos las experiencia
que nos dejaron los años tras tener harta paciencia.
Las tormentas de la vida combaten al corazón
mas mientras quede de amor aunque sea una chispa,
le dará vida a la flor que ya casi se marchita.
Una vez que has aprendido aceptar las diferencias
estas listo para amar, ser feliz no tiene ciencia.
El matrimonio es taller do se tallan corazones,
serrucho, lima, martillo, pegamento y calor,
duele mucho el proceso donde se afirma el amor,
mas al tiempo ya veras que precioso resultado
cuando ambos corazones queden listos y moldeados.
Cuando me alegro aquel día veinticinco años atrás,
acepte tomar tu mano y contigo caminar.
No hay hoy ningún pesar solo el amor me cobija
y me siento tan feliz de ser tu joya mas fina.
Agradezco al Creador que hasta ti me llevo,
no solo te tengo yo sino también Jesucristo,
junto a mi nombre ha escrito en el libro de la vida,
la historia de una familia que junto a ti he construido,
me has dado dos bellos hijos y mucha felicidad
por eso en este día te vengo a felicitar
y en mis versos del alma tu gran amor alabar.