Ojos que se cierran para sentir y soñar
la ciudad del amor bajo mis pies siento temblar
mi corazón late cada vez con más fuerza
una nueva historia comienza.
Camino en adagio sobre el escenario y no miento
desde ya escucho juntarse
las múltiples palmas en un ritmo constante
el valor apoderándose de mí al levantar la mirada
logro ver y sentir apoyo desde cada butaca
profundo suspiro que marca el inicio del movimiento.
Sobre las cuerdas se ve pasar el arco
Tchaikovsky sonando en una sutil melodía
dedos que cabalgan sobre un tasto
ansiando llegar a la última armonía.
Muchas cosas voy comprendiendo
ya la melodía no es muy audible
las lágrimas de mis ojos se están saliendo
en este momento todo es posible.
Un sinfín de sensaciones
aplausos que no cesan
un encuentro con mi yo más íntimo
y ese sueño ya soñado.
La música es mi dueño
desnuda mi alma y la deja expuesta
abro los ojos y despierto
sí, este fue un gran sueño.