Francisco Caleros de la Roca

OJOS SILVESTRES

Esos campestres ojos soñadores

de mi bella niña, rural y traviesa

de mirada serena e inocente

cautivadora, con ese color negro de la noche

¡enciende la pasión campirana!

 

Ojos silvestres que se bañan de colinas

Ojos, que se lavan con agua de manantiales

y se refrescan con el rocío de la mañana.

Son ojos, que reflejan la naturaleza de mi tierra.

 

Ojos silvestres, de mi niña campesina

traviesos como los rayos del sol

que juguetean a mi pobre corazón.

El dejo de tus ojos mi bien, ¡me apasiona!

 

Ojitos silvestres, de mi adorada princesa,

ojos que duermen bajo techos de pajón

que se despiertan con trino de pájaros

primicia de luz de las auroras pastoriles

 

Niña adorada, tierna mirada de ojos silvestres

flores destellantes que derraman colores

iridiscente ternura de luz angelical

¡regálame la ternura de tu mirar!