LUIS ADONAY VENEGAS LEYTON

Anoche cayĆ³ la lluvia

 

Anoche cayó la lluvia

 

La misma que en mis tardes de niño

jugaba con ella

esa que me mojaba

sin mojarme.

Esa que iluminó mis calles

solitarias

con cristales de ojos

que me miraban

y me envolvían

en un manto

de madre,

amiga,

amistad y juegos…

 

Bienvenida hermana,

 tomarás mi mano

y me conducirás

por esas calles de ciudad

como antes lo hacías

borrando el polvo

y lo convertías

en lodo gris

con el que construíamos

figuras y figuras imaginadas.

 

Lavarás mis penas,

refrescarás mi alma

y me envolverás

en tu manto

de madre,

amiga

y compañía

en tanto caminaré la ciudad

mirando

con tus ojos de cristal

multiplicados

con sonrisas

de rostros

desconocidos

que te alaban

y bendicen

por ser las primeras

lágrimas de otoño…

 

Sonrisa y alegría,

aire puro para el alma

y olvido de la mugre

que se respira,

en tanto se camina

por las plomizas calles

de la gran ciudad  

contaminada.