Entiendo que no todo siempre serán rosas
 Habrá también desacuerdos por diversas cosas
 Y sin embargo sólo quiero contigo permanecer
 Apreciarte, observando tus ojos en el alba, y en el amanecer
 Porque de sólo estar lejos, me dejas sin aliento y entre suspiro y suspiro
 Es qué me doy cuenta cuanto sin medida es lo que te quiero
 Porque contigo no camino, sino que caigo en un colchón de hojas secas
 Y Bajo la copa de un árbol leyendo a Sabines, sostengo tu mano
 Es saber que es mágico imaginarnos, sabiendo que no será en vano
 Que mañana estaremos tan apasionados como hoy día
 Y que este amor será como un Fénix que renace de sus cenizas
 No se desvanecerá, ni se esparcirá en el viento
 Si nos perdemos acaso, nos veremos en un reencuentro
 Y te reservaré siempre el sitio supremo de mi amada alma
 Porque la vida seguro que nos aleja, y nosotros entre risas
 Pues sabemos que nada de lo que hagamos quedará en el intento
 Si no que no descansaré hasta tenerme contigo en el féretro
 Iré hacía Ti como un velero con un buen viendo y la mar en calma.