Rafael Escobar

\"ENCRUCIJADA\"

 

El amor de mi vida va escapando
y con miedos y dudas siempre vuela.
El desprecia del alma lo que anhela,
y me deja tan solo divagando.


En las playas vacías de mi anhelo
al ocaso dirijo la mirada,
esperando del mar que traiga el hada
que me brinde la luz que da consuelo.


Anaideia mordaz se me aparece
y me dice tan cínica y sonriente:
el amor es de luces una fuente
que de pronto su rayo languidece.


De tu vida disfruta lo que queda
cual lo hacías en años juveniles;
con aquellas pasiones tan febriles,
porque sueño tan solo pena hereda.


Mas conservo por siempre la esperanza
de encontrar el amor que Aglaya ofrece,
que semeja la rosa que florece
y que brilla por siempre en lontananza.


Autor: Aníbal Rodríguez.