Diego Nicolás García Contreras

elben (8) (refinar)

Hoy es una tarde sin brillo
de luces en el día
doscientos bosques arden
entre tanta melancolía.

Doscientas almas dejan
la libertad encadenada
presa bajo la mesa
reza
para que no se caiga la casa.

Hoy doscientas pasiones se mojan
y se apagan
cual mecha tenue
de una vela

En un recuerdo
brillan tus ojos
hermosa niña
y tus cabellos despeinados
y tu sonrisa incompleta
ahi queda.

Comiendo lentejas
aprendiendo tristezas
a tirones de mechas
y ahi quedas
perpleja.

Con la lágrima cayendo a tientas
suspendida en la pena
desconociendo tus mejillas
redondas e inexpertas.

Cayeron mocos y llanto
entre tu encía desdentada
y tu rostro hierve 
entre rumores de playa.

El fuego estalló en consecuencias
y ahi quedamos
estáticos 
con un lápiz en la mano
o con cién aves que vuelan.

El lecho nos acuesta
y no entrega respuestas
niño llorón
lo prefirieron
por pajarón
y así lo dejas.

Que fluya 
así no se incendia
calcetines blancos hasta las rodillas
zapatos negros
una trenza  
y nada más.

No vistes de princesa
vistes de madre perla
y no recoges flores
juegas a las peleas.

Los juegos que bosquejas
en rondas eternas
cantos y esquemas
tu nos enseñas
porque así te ordenan
a dejar limpio el plato.