mario mena mena

Todo pasa rápido

Cuando niños se piensa que nada se mueve, nada pasa,

una hora es igual a otra y un día es igual a otro día

incluso no sabemos o no nos importa que exista el tiempo.

Ser muchacho es algo que está muy lejos

y ser adulto queda a una eternidad

Creemos que siempre seremos niños.

 

Cuando somos muchachos es la diversión, los descubrimientos

y la idea de iniciar un camino, ir hacia unas metas

decimos que jamás nunca nos casaremos

que nunca tendremos hijos y creemos que nunca nos haremos viejos.

 

Luego, un día, pasados los 30

nos damos cuenta que hay cosas que deben estar completas,

los estudios, un trabajo fijo, una novia permanente

y retos para lograr en los próximos 20.

 

No sé si es de natural que lo neguemos,

o que así nos enseñaron, o las dos cosas

pero - como sea - tenemos la actitud de no determinar el tiempo

Como una necesidad de negar lo inevitable

como si ignorándolo logramos que él no pase,

Creo que es  que tenemos un sentido de eternidad

que nos hace ver lo temporal como eterno.

 

En fin, lo cierto es que un día ya nos hicimos viejos

nos vienen las canas, nos sobran unos kilos

nos cansamos más rápido

nos parece bueno acostarnos temprano

comer más sano y estar en paz.

 

Llega un momento en que uno sabe

que para algunas cosas ya se pasó el tiempo

Aunque todavía nos queden unos años

y la esperanza de vida nos da de ganancia un resto.

 

En todo lado nos dicen \"don, señor, caballero\"

o técnicamente ciudadano de oro, adulto mayor

Es un tiempo en que uno saborea los minutos

no apura las cosas

Sólo flota en el río plácido del tiempo

Selecciona los recuerdos, pero no se pierde en ellos

Mira que el futuro, no muy lejos, tiene una cerca, un lindero

 

Llega la hora en que mejor se comprende el tiempo

que es cierto \"que 20 años no es nada\", que todo pasa rápido,

que parece mentira que se hayan ido más de 50

Calcula con precisión el tiempo que le queda 

y ahora sí, aprovecha cada rato, cada acción y proyecto.