argantonio

Altos jardines

Se presiente el agua que serpentéa,

en esta hora de la tarde que sestea

 

El ruiseñor en la sombra dormita,

reserva su canto para la vespertina cita

 

En los cipreses allá en los altos jardines,

que reciben la caricia de la fresca brisa

 

Ya brilla rojo el ocaso,

y se va acabando la tarde,

lenta y sin prisa