yito

Amada.

 

 

Ella viene de otro tiempo
tan lejano como el mío
del amor conoce el frio.
de la esperanza el aliento.


Yo bebo como el sediento
en el caudal de su río
la tibieza del estío,
la dulzura de su cielo.

 

Dedicado a mi esposa al cumplir 56 años.