ganimedes24

AL CHOPO CABECERO

AL CHOPO CABECERO.

 

Tan generoso y altivo
tan imponente y discreto,
tú, silencioso cautivo
de este terruño escondido.

 

Eres grandioso y longevo,
orgullo de nuestra tierra
conservas el alma pura
sin violación extranjera.

 

Trasmochado en tus comienzos
te negaste a ser pequeño
y en hacerte grande y fuerte
pusiste todo tu empeño.

 

Tus brazos al cielo lanzas
queriendo atrapar sus vientos,
lo ansias y no lo alcanzas
y él raciona tu sustento.

 

Otrora fuiste riqueza,
de las familias provecho,
dabas con verde firmeza
para sus hijos un techo,

 

para el pastor sombra fresca,
para el ganado alimento,
para los pájaros nido,
para la tierra cimiento.

 

¡Con qué mimo te cuidaban
y curaban tu corteza!
en tu juventud truncada
mutilada tu cabeza.

 

Y tú, siempre generoso,
respondes a tal afrenta
mostrándote agradecido
multiplicando su renta,

 

en forma de rectas lanzas
para leña o para vigas,
a cambio de esta escamonda
te perdonaran la vida.

 

Pero el seductor progreso
que alimenta la pereza
contigo ha sido perverso
ignorando tu grandeza.

 

Olvidado de tus gentes,
los que antaño te adoraban
hoy se distraen con cantos
de sirenas que llamaban.

 

Descuidado e ignorado
abandonado a tu suerte
quienes antes bien te amaban
firman sentencia de muerte.

 

Sin el hacha aliviadora
que aligeraba tu carga
a buen seguro que el tiempo
te acaba tronchando el alma.

 

Mas no todo está perdido
tu silencio se ha escuchado
cada vez más corazones
van luchando a tu lado,

 

Con sierras que te acarician
y del peso te descargan
y con voces orgullosas
que del olvido te sacan.

 

Allende nuestras fronteras
tu valía ha trascendido
aunque tú no lo quisieras
extraños te han conocido,

 

Han sabido de tus gestas,
admirado tu belleza,
conocido tus historias
y premiado tu grandeza.

 

Por todo esto te debemos
un futuro duradero,
en prados, ríos y valles
a ti, chopo cabecero.

 

                                       (Ganímedes)