Frögel Franco

Eran dos Extraños

 

Eran dos extraños esa noche

Y ambos soñaron con lo mismo

Vagando errantes en la oscura calle

Como buscando un profundo abismo

 

Eran dos extraños solitarios

Unidos por el tenue hilo del destino

Y cruzando las miradas a lo lejos

Esa noche, dibujaron un camino

 

Parecía tan solo una coincidencia

Para aquel que oyera su cuento

Pero muy en el fondo ya sabían

Que este era su gran reencuentro

 

Eran dos extraños que suspiraban

Y un amor verdadero anhelaban

Y esos dos extraños, sin saberlo

Estaban de frente… y se miraban

 

Eran dos extraños, no tan extraños

Que sin conocerse, juntos caminaban

Que sin hablarse, entre ellos susurraban

Y sin tocarse, parecía que se amaban