Evandro Valladares

PEREGRINAJE A ESQUIPULAS (Basílica del Cristo Negro en Guatemala)

Peregrinaje a Esquipulas

 

El peregrino rendido y cansado

ve del camino la cuesta escabrosa.

Queda  distancia y día soleado,

jornada difícil y fatigosa.

 

Y deteniéndose al pie de la loma

en pájaro convertirse desea

volar transformado en blanca paloma

y llegar pronto a la cercana aldea.

 

El tenaz caminar su fuerza agota,

más mantiene esperanza intacta y pura.

De su corazón el ánimo brota

y llega a su faz aire de frescura .

 

Ya Esquipulas aparece a lo lejos

ya pronto a los pies del Cristo ha de estar.

Confiará sus dudas, penas, complejos

y El sus inquietudes ha de sanar.

 

Cuando un alma su pesadumbre exclama

en la profunda oscuridad medrosa

el piadoso Cristo a su cruz le llama

que dirija a Él su oración piadosa.

 

Si a Él en sus oraciones le nombra

y un haz de fe en su corazón habita

al fiel cubre con su gigante sombra

y el pesar y el dolor del alma quita.

 

 

A su final la jornada ha llegado

el Cristo negro luce majestuoso

el penitente ora al crucificado

y El le sonríe y le mira amoroso.