J Alfredo MV

Días como este

Era un día muy peculiar.

De esos que hacen parecer que tu ímpetu de vivir

se fue por el retrete con tu meada mañanera.

Y tu día de mierda comienza cuando jalas de la cadena.        

 

Cabe mencionar el clima;

influye bastante en días como este,

miras el cielo y está repleto de nubes grises,

ni un solo espacio color azul.      

 

En días como este el tiempo parece transcurrir más lentamente

o bien soy yo el que vive más rápido,

quizás para combatir el frío.

 

Son días lúgubres, sombríos.

Todos y cada uno pone de su parte.

Las personas atavían prendas oscuras para atraer los escasos rayos de sol,

los imprudentes salen de sus agujeros

y los que sufren pendejismo hacen de las suyas.

En días como este los imbéciles se las arreglan para salir

y vaya que saben como cagar el palo.      

 

Pero días como estos, fríos y lluviosos,

nos hacen apreciar el contacto físico;

hasta el más mínimo de estos es realmente cálido.

Reconfortante.      

 

Y los autos parpadean,

pues sienten lluvia,

y tú sientes la lluvia.

Me gusta la lluvia. 

Me encanta la lluvia.

Te hace ser tú mismo,

te obliga a quitarte las gafas,

y ver lo que realmente puedes ver,

lo que debes ver.

Y tu ropa se empapa,

se pega a tu cuerpo,

y tu silueta queda al descubierto

la yema de tus dedos se arruga, 

y tu peinado se arruina.  

Y te muestra quién eres.