Bernardo Arzate Benítez

Las aves maestras.

 

 

 

Toda ave cuando nace trae todo lo necesario:

Alas para elevarse,

plumas que la cubra a diario;

ramas en que posarse.

 

no es así en el ser humano:

No se sabe el desenlace.

Que difícilmente nace,

y a veces no nace sano.

 

Las aves tienen sus padres,

que se turnan al cuidarlo;

que se esmeran en amarlo,

aunque él tenga que dejarles.

 

No es así en el ser humano:

El amor, hoy, no es seguro.

De alimento, quizá, \"un grano\",

o un pedazo de pan duro.

 

Las aves son, pues, maestras,

volando en nuestras cabezas;

y todas esas destrezas...

mas bien, debieran ser... las nuestras.

 

Autor:Bernardo Arzate Benítez