claudio ramirez vasquez

LA OJIVA DE MORRO AYUTA

 

Hace tiempo esperaba este momento

 señor poeta, a dialogar contigo.

   en persona te apersonas conmigo

para escribir todo lo que comento.

 

“La Eternidad me custodia en su abrigo.

  Mi novia, es: La doncella Tristeza;

si estoy triste me obsequia su belleza

  y me sacia con la savia de su  ombligo.

 

¿Acaso por orgullo de grandeza

el ser humano equivoca su sueño?.

En el planeta tierra es un diseño

que se extingue; cual si fuera pavesa.

Pues, la debilidad humana es ¡esa!.

Al juzgarme como una roca inerte.

¡Confieso! que sí; puedo oír y verte.

¡Yo, Soy Yo! Su majestad el Granito

¡El, Es! un intrusivo xenolíto

que en copela, el crisol lo convierte